En una tienda de segunda mano al lado de mi
casa vi una estantería con libros y una pila de casetes de VHS e
inmediatamente pensé en muchas cosas a la vez. ¿Hay una persona en todo el
planeta que aún use VHS? ¿Son los libros tan arcaicos como los casetes de VHS?
¿Si defiendo los libros es igual que defender la tecnología antigua como la de
los casetes de VHS o los trenes de vapor? ¿Cuánto tiempo pasará antes de que
los libros digitales se vuelvan obsoletos? Y ¿Es la hora de comer? Esto último
parece no estar relacionado, pero está siempre entre mis primeros cinco
pensamientos no importa qué hora sea.
Después de pasar tanto tiempo buscando libros
de segunda mano me parece increíble que haya dejado este pasatiempo, como el
tabaco o morderse las uñas, aunque nunca he dejado de fumar o morderme las uñas
(he guardado todos mis malos hábitos). No quiero saber cuánto tiempo he pasado
husmeando libros en las tiendas, rastrillos, y contendores. Mi obsesión por los
libros continúa pero hoy todo lo que busco se encuentra en el gran vertedero
virtual de internet. Mucha gente lamenta la pérdida del mundo de los libros. Yo
no soy sentimental para la tecnología. Celebré el día que regalé toda mi
colección de discos de vinilo. Odiaba desde el principio los Cd y los DVD. Me
imagino que hay pocos individuos que hayan comprado más libros que yo en la
vida. He dejado bibliotecas enteras y ciudades de mi pasado al trasladarme a
otra ciudad o continente. La próxima vez que me vaya, tendré toda mi amplia
biblioteca en la palma de la mano.
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